jueves, 29 de julio de 2010

Las medias. Ese gran enemigo


Hace un par de meses tuve una boda en Pamplona y, como todavía hacía frío, la mayoría de las chicas llevábamos medias.

A mitad de la noche, las chicas de mi mesa empezaron a hablar del rollo que era llevar medias, que hagan lo que hagan nunca consiguen que se queden arriba. Y aproveché para contarles el truco que una compi de trabajo me había dado no hacía mucho: Cuando te pongas las medias, ponte unas braguitas encima  (y que no se te olviden las de debajo, jeje), así no se te caerán en toda la noche.

Otra del grupo compartió otro truquito del que yo no tenía ni idea: para evitar que se hagan carreras en las medias, una vez te las hayas puesto, ponte crema en las manos y cuando ya se haya absorbido -para no manchar-  pásalas por las medias, así no se romperán en toda la noche. 

Yo todavía no lo he probado, pero Ana asegura que no falla...



La sartén me tiene negra


Vacaciones 2010. Galicia. A Coruña. Malpica.

Como todos los años, aprovechamos nuestras vacaciones y nos cogemos un par de semanitas para escaparnos al norte huyendo, como decimos nosotros, del "vuelta y vuelta". Cogimos un apartamento super chulo en el centro del pueblecito. Estábamos a un minuto del puerto y a otro de la playa. El pueblo era precioso y el tiempo nos acompañaba.... pero... el mometo llegó:

Hora de fregar.

Habíamos hecho tostadas para desayunar (él con aceite y yo con azúcar, que me gustan más)... y la sartén se nos había quedado negra. A la hora de ir a limpiarla, el negro no salía y mi novio me contó el truco que tenía su madre para estos casos:

Echa agua en la sartén con un poco de lejía y ponla al fuego. Poco a poco el negro se irá despegando.

¡Funcionó! Y evitamos rayar la sartén :-)